La última semana ha estado marcada por las siguientes noticias en el ámbito del saneamiento de aguas residuales, la pocería, las alcantarillas, los desatascos y los desatrancos:
1) Dos poceros navarros pierden la vida en el trabajo: Esta semana queremos manifestar nuestro más sentido pésame para las familias de los dos compañeros poceros que el 29 de julio perdieron la vida en la depuradora municipal de Corella (Navarra). Con 35 y 54 años de edad, ambos trabajadores cayeron a un pozo de tres metros de altura y un metro de diámetro en el que desgraciadamente perdieron la vida.
Según las investigaciones iniciales, la inhalación de gases pudo estar detrás de la caída, provocando que ambos profesionales perdieran la consciencia y se precipitaran al fondo del pozo, donde finalmente murieron ahogados. Tal es la peligrosidad de los gases que emiten las aguas residuales que las tareas de los bomberos para rescatar los cuerpos de los fallecidos se prolongaron durante tres horas y media.
Descansen en paz ambos compañeros y ojalá que nunca más tengamos que hacernos eco de una noticia tan triste como ésta.
2) En 1.000 zonas de España se depuran mal las aguas residuales: La Unión Europea está analizando la forma en que 1.000 puntos de España depuran sus aguas residuales, entre municipios, pedanías y urbanizaciones. Al parecer, en estas zonas las aguas residuales se vierten directamente al mar y los ríos o se vierten con un tratamiento defectuoso que provoca problemas medioambientales. Es hora de tomar medidas.
3) Preocupante situación del alcantarillado del Mar Menor: El Mar Menor, en Murcia, es una de las zonas más afectadas por los problemas de saneamiento de aguas residuales que afectan a muchas zonas de la costa española. Tradicionalmente se ha culpado a los vertidos agrícolas de los altos niveles de contaminación de este emblemático punto de La Manga, pero ahora se han difundido datos que apuntan a otros responsables.
Según la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), la mitad de las viviendas del entorno del Mar Menor carece de conexión a la red de alcantarillado, por lo que siguen usando fosas sépticas y vierten sus aguas residuales a la laguna. Esto, según COAG, explicaría el color verdoso que en los últimos tiempos ha teñido el Mar Menor, considerado uno de los puntos en mayor riesgo del litoral mediterráneo.
Al parecer, el vertido al mar de las aguas fecales sin ningún tratamiento previo está detrás de los bajos niveles de nitrato que actualmente registra la laguna del Mar Menor. Por su parte, la cantidad de fósforo está aumentando significativamente, lo que, según los agricultores, significa que las estaciones depuradoras de aguas residuales de la zona no están funcionando lo bien que deberían.
4) Las aguas residuales permiten saber cuánto tabaco fumamos: Los metabolitos de la nicotina son expulsados por los fumadores a través de la orina. Su medición en las aguas residuales permiten monitorizar la absorción de la nicotina e indirectamente el consumo real de tabaco en una población, tal como explican en esta noticia.
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