Algunas capitales españolas innovan en saneamiento de aguas residuales, otras combaten las toallitas y otras las inundaciones…
Más saneamiento para proteger la Albufera de Valencia
La solución para proteger el lago de la Albufera de Valencia es invertir en saneamiento de aguas residuales. Así lo ha entendido el Gobierno de España, que acaba de aprobar una inversión de 14,3 millones de euros en saneamiento de aguas residuales para reducir hasta en un 50% la contaminación que en la actualidad padece este espacio natural.
Hasta ahora, el lago venía sufriendo vertidos de aguas residuales procedentes del área metropolitana de Valencia que han puesto en peligro la calidad de sus aguas. Para remediarlo, los trabajos aprobados por el Ejecutivo central pretenden interceptar estos vertidos, especialmente en épocas de fuertes lluvias, que es cuando registran unos volúmenes más elevados.
Saneamiento de aguas residuales autosuficiente en la Costa del Sol
Las cuatro estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) más importantes de la Costa del Sol están muy cerca de convertirse en autosuficientes desde un punto de vista energético. Y lo van a conseguir gracias a una inversión de cinco millones de euros en un nuevo sistema denominado ‘digestión anaerobia’.
Lo que hará este proceso es generar biogás a partir de los residuos orgánicos que cada día se tratan en estas depuradoras. A su vez, ese biogás será aprovechado por una central de cogeneración que lo transformará en energía térmica y electricidad. A su vez estas dos fuentes de energía se utilizarán para cubrir las necesidades energéticas de estas instalaciones de depuración de aguas residuales, que darán así un importante salto en términos de eficiencia energética y también de reducción de emisiones contaminantes.
Zaragoza se gasta 150.000 euros al año por culpa de las toallitas
Los operarios de pocería del Ayuntamiento de Zaragoza retiraron el año pasado 359 toneladas de toallitas húmedas y otros residuos que terminaron en las alcantarillas cuando es a los contenedores de basura donde tendrían que haber ido a parar. La cifra es ligeramente inferior a las 366 toneladas retiradas en 2021, pero sigue siendo muy alta y también muy costosa.
Según explican desde el consistorio zaragozano, los atrancos, atascos y averías en las redes de alcantarillado municipales por acumulación de toallitas no biodegrdables tiene un coste extra de 150.000 euros al año para los vecinos de la capital de Aragón, pues obliga a limpiar las cloacas cada 15 días. Y a eso habría que añadir el coste relacionado con las reparaciones de las instalaciones de saneamiento de aguas residuales como consecuencia del mal uso que se hace de los desagües.
Las inundaciones ponen a prueba la red de saneamiento de Lugo
La ciudad de Lugo sufrió el pasado domingo una intensa tormenta que puso a prueba la capacidad de su red de saneamiento de aguas residuales y alcantarillado. Los resultados no fueron todo lo positivos que sería deseable, ya que las fuertes lluvias dejaron garajes anegados, calles llenas de tierra e incluso inundaciones en algunas infraestructuras públicas como el Hospital Universitario Lucus Aucusti o el recinto deportivo Anexo del Pazo dos Deportes.
El problema no es tanto del sistema de saneamiento de aguas residuales de Lugo, según han alegado desde el ayuntamiento, sino de la propia orografía de la ciudad: hay zonas con poco desnivel, lo que facilita la acumulación de agua. No obstante, hay quien ya exige una ampliación del sistema de alcantarillado en algunos puntos de la capital lucense para afrontar con garantías los periodos de fuertes trombas de agua, que debido al cambio climático amenazan con ser cada vez más habituales.
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