Las ciudades españolas invierten en saneamiento y reutilización de aguas residuales, mientras conviven contra las toallitas y los vertidos…
El 99% de las aguas residuales de Murcia se reutilizan en el campo
La sequía que históricamente ha afectado a la Región de Murcia ha obligado a sus instituciones regionales a realizar una decidida apuesta por la reutilización de las aguas residuales. Y esta estrategia se ha traducido en unos resultados que hablan por sí solos, ya que el 99% de las aguas residuales procedentes de las industrias y hogares son depuradas y reutilizadas.
Para conseguirlo, Murcia cuanta con una importante infraestructura formada por casi un centenar de estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) y más de 50 estaciones de bombeo. Estas instalaciones se ocupan de depurar y tratar las aguas fecales, que luego son reutilizadas para el riego de la huerta murciana. Estas aguas regeneradas no solo favorecen la economía circular, sino que también destacan por su calidad y seguridad.
Reus arroja cada día media tonelada de toallitas a las alcantarillas
Para conocer la verdadera dimensión del problema de atascos y atrancos provocado por las toallitas húmedas (no biodegradables) en las redes de alcantarillado basta con analizar el caso de Reus. Este municipio tarraconense de poco más de 100.000 vecinos arroja cada día cerca de media tonelada de toallitas a la red de saneamiento de aguas residuales.
Esto significa que cada habitante de Reus tira cinco kilos de toallitas húmedas por el WC cada día, una cantidad a la que hay que añadir las toneladas de este tipo de residuos que se arrojan diariamente a las redes de alcantarillado del resto de España. Lo peor es que se trata de un problema cada vez más grande, ya que se calcula que el 75% de los residuos que llegan actualmente a la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) de Reus corresponde a toallitas húmedas.
Málaga moderniza su red de saneamiento de aguas residuales
La ciudad de Málaga ha invertido recientemente 400.000 euros en un proyecto destinado a modernizar parte de su red de saneamiento de aguas residuales. En concreto, los trabajos afectan a las canalizaciones situadas bajo las calles Biznaga, Portal y Porta.
Entre otras acciones, se han sustituido las antiguas redes de agua y saneamiento de aguas residuales y se ha construido un nuevo colector, además de mejorarse el sistema de drenaje de la zona. Todo ello ha permitido desdoblar el anterior sistema de saneamiento, pasando de un modelo unitario a otro separativo.
Charcos de aguas residuales en Cuenca junto al río Júcar
El mal estado de las redes de saneamiento de aguas residuales y alcantarillado en ocasiones puede llegar a provocar escenas muy desagradables. Un nuevo ejemplo de ello lo hemos encontrado en la ciudad de Cuenca, donde los vecinos llevan bastante tiempo conviviendo con charcos de aguas fecales en el Paseo del Júcar.
Al parecer, esos charcos son consecuencia de la filtración de vertidos y aguas residuales, y suponen un problema de tipo medioambiental, sanitario y reputacional. Por todo ello, las agrupaciones políticas locales llevan años exigiendo al ayuntamiento que ponga soluciones para acabar con esta situación, que muestra sus peores efectos en épocas de lluvias intensas y crecidas del río Júcar.
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