Resumimos las principales noticias publicadas durante los últimos días por los medios de comunicación en el ámbito de las alcantarillas, las cañerías, los atrancos, los atascos y las redes de alcantarillado…
Las aguas residuales españolas se limpian de virus
Según la herramienta de vigilancia microbiológica puesta en marcha en julio del año pasado por las autoridades españolas, las aguas residuales de las estaciones depuradoras presentan actualmente el nivel de concentración de coronavirus más bajo desde finales del verano pasado. En concreto, la presencia del virus se mantiene estable o ha caído en un 75% de las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) participantes en el análisis.
Esta herramienta muestrea y analiza cada semana las aguas fecales que entran en las depuradoras, siendo un indicador muy útil para medir la evolución de la pandemia y anticiparse a posibles rebrotes. De hecho, la Unión Europea ya ha recomendado al resto de países comunitarios que pongan en marcha un sistema similar al de España, que en los próximos meses será ampliado con más depuradoras y capacidad para medir la evolución de las distintas variantes de coronavirus existentes.
España progresa adecuadamente… pero despacio
A pesar de que el saneamiento de aguas residuales español sigue bajo la lupa de Bruselas, la Comisión Europea ha reconocido los avances registrados en nuestro país desde 2015. En estos seis años, 274 aglomeraciones urbanas españolas han abandonado el grupo de las que fueron denunciadas por las autoridades comunitarias por sus deficiencias en saneamiento.
Según la Comisión Europea, todavía quedan 332 núcleos urbanos en los que las mejoras acometidas han sido insuficientes en materia de recogida y depuración de aguas residuales. No está de acuerdo el Gobierno español, que reduce esa cifra a 231 aglomeraciones. En todo caso, nuestro país quiere introducir cuanto antes las mejoras necesarias, para lo que jugará un papel fundamental el Plan Nacional de Depuración, Saneamiento, Eficiencia, Ahorro y Reutilización (DSEAR), que en teoría se aprobará en las próximas semanas.
Extremadura construirá nuevas depuradoras de aguas residuales
La Junta de Extremadura quiere poner en marcha nuevas instalaciones de saneamiento de aguas residuales en la provincia de Badajoz. Para ello, el gobierno autonómico ha aprobado los decretos para ocupar los terrenos en los que construirá nuevas estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) que darán servicio a varias localidades de la comarca de La Serena.
Junto a las plantas de depuración se construirán otras infraestructuras complementarias. Todas estas instalaciones, que estarán cofinanciadas con fondos europeos, servirán para prevenir problemas higiénicos, sanitarios y medioambientales, así como para evitar malos olores y la presencia de mosquitos en los actuales puntos en los que se producen los vertidos de las aguas residuales de estos municipios.
Burgos, la ciudad que no teme a las toallitas
Las toallitas higiénicas no biodegradables se han convertido en uno de los principales quebraderos de cabeza de los responsables de gestionar las aguas residuales de la mayoría de ciudades. Aunque no de todas, ya que en Burgos son ajenos a esta problemática gracias a las particularidades de su red de saneamiento y alcantarillado.
El sistema de aguas residuales burgalés funciona por gravedad y no por puntos de bombeo, que es donde las toallitas provocan verdaderos estragos. Por eso, los responsables del saneamiento de la ciudad no han tenido que lidiar con los problemas de atascos y atrancos que sí enfrentan sus homólogos de otras urbes españolas. Además, tres camiones limpian a diario las canalizaciones de Burgos para garantizar su correcto mantenimiento.
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